Hace mucho tiempo no me sentía tan bien, tan viva. Por primera vez puedo sentirme muy bien, en un 95% diría yo.
Me enfoco en ese 95% porque el restante no importa en absoluto ahora. Me siento bien porque por primera vez estoy saciando mis necesidades sociales: de liderazgo, poder, y angustia. Sentí que si entraba en la organización mi vida iba a cambiar y así es; trabajar en AIESEC es de los placeres más geniales del mundo, así como cuando se come chocolate porque quieres y no te importa engordar... Mi motivación intrínseca cada vez sale más a flote porque quiero vivir, aprender y cumplir mis sueños (así suene muy cursi o rosa) pero es la verdad. Es decir, salí, me junté con gente nueva, conocí nuevas personas y compartí en ambientes fuera de lo común. Me fue bien, diría yo.
Cada vez me siento más fuerte, mejor persona y activista ante todo. Me siento cada vez mejor con mis acciones, con mis criterios (algunos) y me gusta ser quien soy. Sé que soy muy directa, mi cara no refleja empatía ni soy muy dulce, que me río de cosas muy crueles y que soy muy fría. Pero soy así, mi confianza está distribuida en pocas personas, poquísimas y la verdad me sienta bien eso.
Sí, algunas veces se me sale el meloso, el buena persona y últimamente, el positivismo, aunque más centrado en las acciones y yo siempre lo he hecho. Desgraciadamente mi país no tiene ese ambiente para que fomentes las ganas de seguir adelante, de triunfar como debe ser, de continuar con tus sueños porque los nublan o muchos te ganan sin saber por la corrupción. Me encantaría vivir en un mundo donde las cosas, los sueños, el aprendizaje y demás fueran más fáciles, más entendibles y cumplibles, otro país, sí.
Septiembre y Octubre han sido realmente buenos, viajes con amigos, nuevas temporadas de mis series favoritas (hace una semana comenzó Supernatural, hoy comienza Gossip Girl y el jueves Vampire Diaries) y nuevos libros, incluso eróticos. Ya me ataca el desespero por hoy y por el jueves, he esperado por meses a saber de qué pasará por todos los contextos de moda y de vampiros que no brillan. Quiero que este año acabe con broche de oro.
Saludos.